Incluye bibliografía (p. 23), e índice.

En el mes de marzo de 2020, con el objetivo de evitar la transmisión del virus COVID-19, se puso en marcha el proceso ingenieril en la producción de equipamiento y piezas sencillas para protección del personal de la salud utilizando la tecnología de impresión 3D como medio de fabricación. Se redistribuyó el laboratorio de impresión 3D que se encontraba instalado en el Polo Tecnológico de la Universidad de la Matanza (CeDIT) y se asignaros 12 impresoras 3D para generar viseras de protección para ser entregadas a los centros de salud pública de la zona. Previamente se puso esfuerzo en la exploración, investigación y decisión sobre cuál de los objetos libres que actualmente se estaban produciendo en otros países, también afectados por la pandemia, sería el más apto para la situación de Argentina. Luego, con la ayuda de profesionales de la salud dentro y fuera de la Universidad, se definió que modelo utilizar. Durante el transcurso del programa no solo se cumplió con la producción de máscaras faciales, sino también se pudieron desarrollar otros objetos de uso médico de aplicación en la pandemia con material reciclado (conectores de respiradores, abre puertas, dispensers automático de alcohol, entre otros)